« Jeri » es un cóctel irresistible que combina un lugar de ensueño, preservado de las grandes ciudades, una costa excepcional con sus aguas a 28 °, la posibilidad de practicar multitud de actividades (paseos a caballo, surf, windsurf, kitesurf, capoeira, Paseos en buggy para descubrir lagunas vírgenes en medio de dunas fuera de este mundo).

La vida en Jeri es extremadamente pacífica y tranquila. El pueblo está formado por 6 hermosas calles de arena fina, enmarcadas por una playa interminable, una colina verde y la enorme duna que te permite disfrutar del sol hasta sus últimos momentos. Es un lugar mágico propicio para el descubrimiento y el encuentro, las energías son muy buenas y la mayoría de los viajeros permanecen por más tiempo de lo planeado ... También es un lugar muy romántico, muy destacado para la luna de miel en Brasil, desde ya veinte años ...

La temporada alta es de julio a febrero y durante este tiempo es muy recomendable reservar con anticipación. No olvidemos que este pueblo es muy seguro día y noche!